martes, 27 de noviembre de 2007

Poemas I

Amen

¿Cuantos daños colaterales?
Demasiada conciencia dormida.
Poca humanidad,
en los reinos del capital.

Cierren los ojos, consuman,
y consumanse, por dentro.
Amontonamiento de objetos,
sin indicios de cura.

Teatro de noticias,
a la hora de adelgazar.
Dosis de empleo temporal,
y gracias.

No hay verso tan largo,
que cubra este estrecho,
que separa al infierno.

Pido precio por este planeta.
En venta.

Señor, no nos dejes caer en la tentación
y libranos del mal.
Amen.

Vuelta de hoja

La densidad de tu ausencia,
se extiende por la habitación.

Los ecos aguantan en pie,
hablando de otras cosas,
en otros términos,
y por otras bocas.

Inerte, esperando otra espera,
otra vuelta de hoja deshojada,
con las pupilas dilatadas,
frente al escaparate de respuestas.

A la lumbre de una noche,
donde necesito oscuridad.
En el séptimo cielo,
anidan raíces de ciudad.

Señores y señoras,
se han abierto las venas,
las puertas del infierno.
Pasen y vean.

Temporal

El ruido de un silencio ensordecedor,
incrustado en las paredes entumecidas,
de aquel viejo callejón con salida
donde se refugian las mil y una noches,
que vivieron un cuento de infancia.

Contrato temporal bajo cuerda,
asfixiando el aire en el patíbulo,
el aliento del verdugo,
en la última sala de espera,
donde ya piden precio por tu cabeza.

Todo retiene el aspecto fabril,
una construcción arcaica,
de una inagotable lírica.

Imagino una nueva imaginación,
una infinita descripción,
de lo llamado indescriptible.

Aún por cometer

A marchas forzadas,
en la última curva,
asaltando la madrugada,
estaba fuera de lugar.

Pidiendo asilo bajo las sabanas,
envenenado en el lugar más prohibido.J
ugando a ser dios,
volvería a perder.

Faltó la inspiración,
en mi última palabra.

Última parada al sur,
donde no termina el mapa.

Resistiré un último segundo,
otra forma de ver la vida,
defendiendo en primera línea,
un nuevo significado de futuro.

Gente

Gente tras barrotes de ideales,
cuyo crimen fue un pensamiento,
entre susurros bajo llave.

Gente que nunca quiso callar,
sino retrasar el momento,
en el que iniciarse en la palabra.

Estos días de mayo sangran,
y ya no existen barricadas,
ni hay playas sobre adoquines.

Recuerdos envasados al vacío.
Saturación de frío,
para todos los desterrados.

1 comentario:

Maikólika dijo...

"Amen": Brutal, redondo, un 10.
(heras)

:-D